Por muy difícil que sea una situación, siempre habrá una salida. Fotografía tomada por Mateusz Stachowski, para descargarse del banco gratuito de imágenes http://www.sxc.hu
«Los medios de comunicación juegan un papel significativo en la sociedad actual. Debido a esa influencia, los medios de comunicación también pueden jugar un rol activo en la prevención del suicidio. La mayoría de las personas que se plantean la idea del suicidio son ambivalentes. No están seguras de querer morir. Uno de los muchos factores que pueden llevar a una persona vulnerable al suicidio es la publicidad sobre este tema en los medios de comunicación. La forma como estos medios informan acerca de casos de suicidio puede influir en otros suicidios.
«Existe evidencia suficiente para sugerir que algunas formas de cubrimiento periodístico y televisivo real del suicidio están asociadas con un exceso en suicidios estadísticamente significativo; el impacto parece ser mayor entre la gente joven. Los clínicos y los investigadores reconocen que no existe cubrimiento de noticias sobre el suicidio per se, sino cierto tipo de cubrimiento noticioso que aumenta el comportamiento suicida en poblaciones vulnerables. A la inversa, ciertos tipos de cubrimiento pueden ayudar a prevenir la imitación del comportamiento suicida».
Con esta reflexión, la Secretaría del Interior Departamental invitó a los periodistas a hacer un cubrimiento responsable de las cifras de suicidios del primer semestre del año pasado. Este llamado es más pertinente ahora que los casos de suicidios en Barranquilla han aumentado en lo corrido del año, comparados con los registros de 2011.
29 personas se quitaron la vida en esta ciudad entre enero y agosto de 2012, informó Víctor Pacheco, director seccional del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses, y hasta el 12 de agosto, 37 habían intentado quitarse la vida según registros de la oficina de Vigilancia Epidemiológica del Sistema de Vigilancia de Salud Pública.
«Cada día hay en promedio casi tres mil personas que ponen fin a su vida, y al menos 20 intentan suicidarse por cada una que lo consigue», revela la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Para hacer más visible la lucha de las organizaciones en el mundo en contra del suicidio, cada 10 de septiembre se celebra el día de la Prevención del Suicidio, iniciativa de la OMS y la Asociación Internacional para la Prevención del Suicidio.
¿CÓMO INFORMAR SOBRE EL SUICIDIO?
Sergio Nucci López, coordinador del Centro de Investigaciones y Analisis del Delito del Atlántico, recomienda:
• Las estadísticas deberán interpretarse cuidadosa y correctamente.
• Los comentarios espontáneos deberán manejarse con cuidado en vista de las presiones por tiempo.
• Las generalizaciones basadas en cifras pequeñas requieren particular atención y las expresiones tales como “epidemia de suicidios” y “el lugar con mayor tasa de suicidios ” deberán evitarse.
• Se debe evitar informar el comportamiento suicida como una respuesta entendible a los cambios o la degradación social o cultural.
• El cubrimiento sensacionalista de suicidios deberá evitarse de manera diligente, particularmente cuando involucra a una celebridad. Este cubrimiento deberá minimizarse hasta donde sea posible.
• El suicidio no deberá describirse como un método para enfrentar problemas personales tales como bancarrota, incapacidad de aprobar un examen, o abuso sexual.
• Los informes deberán tener en cuenta el impacto sobre las familias y otros sobrevivientes en términos del estigma y el sufrimiento psicológico.
• Glorificar a las víctimas de suicidio como mártires y objetos de adulación pública puede sugerir a las personas vulnerables que la sociedad honra el comportamiento suicida. En vez de eso, deberá hacerse énfasis en lamentar la muerte de la persona.
• Describir las consecuencias físicas de intentos de suicidio (daño cerebral, parálisis, etc.) puede actuar como elemento de disuasión.
La OMS elaboró este documento:
¿QUÉ NO HACER?
La OMS recomienda:
• No publicar fotografías o notas suicidas.
• No informar detalles específicos del método usado.
• No dar razones simplistas.
• No usar estereotipos religiosos o culturales.
• No aportar culpas.
¿QUÉ HACER?
• Trabajar estrechamente con autoridades de la salud en la presentación de los hechos.
• Referirse al suicidio como un hecho logrado, no uno exitoso.
• Presentar sólo datos relevantes en las páginas interiores.
• Resaltar las alternativas al suicidio.
• Proporcionar información sobre líneas de ayuda y recursos comunitarios.
• Proporcionar información sobre líneas de ayuda y recursos comunitarios.
• Proporcionar información sobre líneas de ayuda y recursos comunitarios.
• Publicitar indicadores de riesgo y señales de advertencia.